"La maldad vive dentro de todos nosotros y se esconde bajo buenas intenciones.
La mejor jugada del diablo es convencernos de que no existe, pero yo acababa de descubrir en qué lugar de mi corazón se ocultaba".
Suele pasar, cuando nos gusta un libro, que al finalizarlo quedemos deseosos de volver a ver a algunos personajes que se nos hicieron queribles, esperando saber cómo continua su vida.
Por eso nos fue muy grato encontrarnos con la publicación, hace muy pocos días, de esta segunda novela que nos ofrece la autora, en donde Gracia San Sebastián y los suyos terminan afrontando, - y resolviendo - , otra historia criminal.
Y se trata de una muy buena novela, muy disfrutable, que mantiene un ritmo ágil y se lee muy rapidamente.
Desde el punto de vista narrativo incluye capítulos narrados en primera persona por la protagonista y otros, menos frecuentes, por un narrador omnisciente. Además, hay saltos temporales en una historia que, además de Oviedo, nos lleva de paseo a Gijón, Copenhague, y Zurich.
Si la primer novela era, básicamente un relato de misterio al estilo tradicional que coexistía con el de vida cotidiana y laboral de Gracia, sus amigos y familiares, ahora nos encontramos, en un giro - si se quiere - más hacia el thriller, con una trama policial más fuerte y más compleja, donde la autora, con mucha habilidad, y sin abandonar la atmósfera de cotidianeidad y las delicias gastronómicas que la acompañan, con mucho humor, y con algunas consideraciones sobre la ética, lo legal y la justicia, nos presenta a criminales mientras cometen sus crímenes, y a un grupo de sospechosos muy bien caracterizados como tales, lo que mantiene activa la dosis de suspenso.
La novela, que incluye asesinatos con una puesta en escena particular, comienza con mucha intensidad mostrándonos a alguien preparando un crimen. Luego ya con Gracia , a la que le piden, como favor, que averigüe el paradero de una joven mujer desaparecida.
En cuanto a los protagonistas, nos encontramos con una San Sebastián más vulnerable y confusa, que afronta dificultades en su relación de pareja, y en su labor profesional. Y es en la investigación, realizada un poco a los tumbos, y casi sin quererlo, donde la mujer, ya más netamente devenida en detective, va logrando ir encontrándose a si misma. La acompañan en el camino, como antes, los deliciosos Rafa, Geni, Sarah, y esa madre tan especial que tiene la protagonista, a quienes esperamos verlos, más temprano que tarde , en un nuevo caso, mientras recomendamos, desde ya, la lectura de esta excelente Un asesino en tu sombra.
Por eso nos fue muy grato encontrarnos con la publicación, hace muy pocos días, de esta segunda novela que nos ofrece la autora, en donde Gracia San Sebastián y los suyos terminan afrontando, - y resolviendo - , otra historia criminal.
Y se trata de una muy buena novela, muy disfrutable, que mantiene un ritmo ágil y se lee muy rapidamente.
Desde el punto de vista narrativo incluye capítulos narrados en primera persona por la protagonista y otros, menos frecuentes, por un narrador omnisciente. Además, hay saltos temporales en una historia que, además de Oviedo, nos lleva de paseo a Gijón, Copenhague, y Zurich.
Si la primer novela era, básicamente un relato de misterio al estilo tradicional que coexistía con el de vida cotidiana y laboral de Gracia, sus amigos y familiares, ahora nos encontramos, en un giro - si se quiere - más hacia el thriller, con una trama policial más fuerte y más compleja, donde la autora, con mucha habilidad, y sin abandonar la atmósfera de cotidianeidad y las delicias gastronómicas que la acompañan, con mucho humor, y con algunas consideraciones sobre la ética, lo legal y la justicia, nos presenta a criminales mientras cometen sus crímenes, y a un grupo de sospechosos muy bien caracterizados como tales, lo que mantiene activa la dosis de suspenso.
La novela, que incluye asesinatos con una puesta en escena particular, comienza con mucha intensidad mostrándonos a alguien preparando un crimen. Luego ya con Gracia , a la que le piden, como favor, que averigüe el paradero de una joven mujer desaparecida.
En cuanto a los protagonistas, nos encontramos con una San Sebastián más vulnerable y confusa, que afronta dificultades en su relación de pareja, y en su labor profesional. Y es en la investigación, realizada un poco a los tumbos, y casi sin quererlo, donde la mujer, ya más netamente devenida en detective, va logrando ir encontrándose a si misma. La acompañan en el camino, como antes, los deliciosos Rafa, Geni, Sarah, y esa madre tan especial que tiene la protagonista, a quienes esperamos verlos, más temprano que tarde , en un nuevo caso, mientras recomendamos, desde ya, la lectura de esta excelente Un asesino en tu sombra.
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