"Escalamos la colina como en un sueño; cada una de las cosas relacionadas con esta carrera me parece confusa y envuelta en brumas. Y de pronto, surgiendo de la sombra, por encima del paisaje, como un monstruo terrorífico en una pesadilla… Algonquin Prison. Hasta ahora no había comprendido que cosas inanimadas, como la piedra o el acero, pudiesen ocasionar una impresión de espanto."
Entretenida novela policial que nos presentan los autores que firman bajo el seudónimo de Ellery Queen.
En este caso, a falta de uno, hay tres detectives que colaboran en la investigación: Patience Thumm, una joven impulsiva, inteligente y con un gran poder de deducción, quien oficia de narradora en primera persona, su padre, un famoso ex policía devenido en investigador privado, que aporta su experiencia y su habilidad en los interrogatorios, y, Drury Lane, un anciano y pintoresco ex actor que padece sordera y que actúa como sagaz detective aficionado.
Entre los tres deben afrontar el asesinato de un corrupto senador, y tratar de salvar de la condena - en una carrera contra el reloj - , a un ex presidiario injustamente acusado del crimen.
Ambientada en una ciudad de provincia, aunque aparecen algunos estereotipos, - el joven y ambicioso fiscal de distrito más preocupado por su carrera política que por descubrir la verdad, el anciano y piadoso sacerdote, entre otros -, nos encontramos con una novela de plena acción y suspenso que además incluye, por ser parte importante de la trama el ámbito carcelario, muchas alusiones a la situación de los presos, opiniones sobre la pena de muerte, e incluso, una escalofriante descripción de una ejecución en la silla eléctrica.
En definitiva, una novela que, seguramente, no defraudará a los amantes del género.
En este caso, a falta de uno, hay tres detectives que colaboran en la investigación: Patience Thumm, una joven impulsiva, inteligente y con un gran poder de deducción, quien oficia de narradora en primera persona, su padre, un famoso ex policía devenido en investigador privado, que aporta su experiencia y su habilidad en los interrogatorios, y, Drury Lane, un anciano y pintoresco ex actor que padece sordera y que actúa como sagaz detective aficionado.
Entre los tres deben afrontar el asesinato de un corrupto senador, y tratar de salvar de la condena - en una carrera contra el reloj - , a un ex presidiario injustamente acusado del crimen.
Ambientada en una ciudad de provincia, aunque aparecen algunos estereotipos, - el joven y ambicioso fiscal de distrito más preocupado por su carrera política que por descubrir la verdad, el anciano y piadoso sacerdote, entre otros -, nos encontramos con una novela de plena acción y suspenso que además incluye, por ser parte importante de la trama el ámbito carcelario, muchas alusiones a la situación de los presos, opiniones sobre la pena de muerte, e incluso, una escalofriante descripción de una ejecución en la silla eléctrica.
En definitiva, una novela que, seguramente, no defraudará a los amantes del género.
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