"Siguió un breve silencio como un hechizo. Ninguno de los dos dijo nada. A él le bastaba sentirla cerca, contemplando el Bund.
Y entonces vio el parque y el malecón —«barridos por confusas alarmas de lucha y huida / donde ignorantes ejércitos se enfrentan por la noche»— una escena experimentada por otro poeta, en otra época, en otro lugar, con alguien de pie a su lado."
Segunda novela protagonizada por Chen Cao, el jefe de detectives a quien ya conocimos en "Muerte de una heroína roja". En esta nueva entrega, mientras en un parque céntrico encuentran el cadáver de un hombre brutalmente asesinado en lo que parece ser un ajuste de cuentas mafioso, a Chen le encargan una misión especial: acompañar, proteger, y ayudar, a una joven agente del FBI cuya misión es encontrar y llevar a Estados Unidos a una mujer, esposa de un testigo protegido por el gobierno norteamericano.
Con una trama policial bien desarrollada; con personajes muy bien caracterizados, y con el plus de establecer un interesante, aunque previsible, contrapunto entre Chen y su colega norteamericana; con abundantes imágenes de esa China de los 90, tan cambiante y plena de contrastes, con muchas referencias tanto a la cultura, las comidas y las costumbres tradicionales, como a los aspectos más políticos del régimen, y, dada la afición literaria del protagonista, con un marco poético que acompaña la narración; nos encontramos, entonces, con una muy buena opción de lectura que, desde ya, recomendamos.
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